Este año llegarán a Misiones aproximadamente 70 millones de pesos para planes de reconversión productiva, que son manejados por el Gobierno renovador y los gremios tabacaleros; APTM, que es el gremio mayoritario, y la Cámara del Tabaco, que administra sólo una pequeña porción.
Un porcentaje de ese dinero (12,5 millones) será destinado a compensar el precio del kilo ya que el acuerdo entre los gremios y las empresas acopiadoras no conformó a los productores.
La mayoría de los planes de diversificación productiva, por diversas razones, terminaron en fracaso. Los recursos fueron en muchos casos malgastados o desviados y los objetivos de los proyectos no se cumplieron en su gran mayoría. Sólo unos pocos funcionaron de acuerdo a los planes.
Como ejemplo, la Cooperativa Tabacalera (CTM), la APTM y la Fundación de Asuntos Agrarios (una asociación civil presidida por el ministro del Agro que le permite manejar millones por año a pesar de ser funcionario), desde el año 2000 a esta parte administraron recursos para implementar al menos treinta planes de diversificación, sin embargo, el número de productores que viven del tabaco sigue siendo el mismo: alrededor de 13 mil familias, es decir unas 80 mil personas. En fin, prácticamente no hubo reconversión.
Producción de stevia, cuenca cebollera, cuenca granera, producción apícola, producción porcina, ganadería, cuenca cañera, apicultura, letrinas, sulfato y producción avícola son sólo algunos de los proyectos que aparecen siendo ejecutados en Misiones en la lista que poseen los Ministerios de Agricultura y de Producción de la Nación.
“Con todos los planes y la cantidad de millones de pesos que llegaron en los últimos años, si se hubieran ejecutado con transparencia, la producción de tabaco ya debería estar diversificada, pero sigue siendo la misma cantidad de productores que viven del tabaco en la provincia”, describió un delegado de APTM de San Vicente, disconforme por los desmanejos en la administración de los recursos.
El Gobierno provincial, en algunos casos a través de cooperativas, y en otros de la mano de la Fundación de Asuntos Agrarios, utilizó los fondos del FET, que deberían ser invertidos en el sector, para actividades que nada tienen que ver con la producción tabacalera, por ejemplo un proyecto para tomar imágenes satelitales de toda la provincia para lo cual se contrató un avión y se utilizaron dos millones y medio de pesos.
Desde la Legislatura provincial tampoco hubo preocupación en transparentar los manejos, ya que la Comisión de Seguimiento del Fondo Especial del Tabaco, constituida hace algunos años a raíz de las irregularidades denunciadas, estuvo casi todo el tiempo frenada por inacción de la mayoría de los diputados de la renovación.
El mismo gobernador Maurice Closs admitió errores: “Hicimos una cuenca granera donde no había granos”, reconoció durante uno de sus discursos el 1 de mayo en la Legislatura Provincial. Closs desvió varios millones de pesos del FET hacia el promocionado plan Pro-Alimentos, y benefició con créditos en muchos casos a productores que no se dedican al tabaco.
Los cientos de millones que llegaron en los últimos años se manejaron con discreción, con poca transparencia e improvisación. El Ministerio del Agro de Misiones es responsable por todos los proyectos, pero la ejecución de la mayoría queda en manos de la CTM, de la APTM y de la Fundación de Asuntos Agrarios que maneja el ministro del Agro Néstor Ortega.
El presidente del Concejo Deliberante de El Soberbio, Carlos “Jair” Pereira, que además es síndico titular de la APTM y se encuentra en plena campaña política para ser vice intendente, recibió 700 mil pesos del FET para administrar a través de una desconocida cooperativa de apenas 26 socios y que ni siquiera tiene una sede física. Este ejemplo fue sólo la punta del ovillo que despertó el informe que a continuación se despliega.
Grandes Obras Inutilizadas
La zona del Alto Uruguay se encuentra colmada de grandes emprendimientos y millones de pesos invertidos provenientes del FET para reemplazar la producción tabacalera. Sin embargo, la improvisación, la falta de estudios de viabilidad previos a la creación de cooperativas y los desmanejos, llevaron a que la mayoría de esos grandes emprendimientos se encuentren en la actualidad abandonados y en desuso.
Un caso representa la Cooperativa Esenciera Sargento Cabral, ubicada en el kilómetro 18 de la ruta provincial 13 en El Soberbio. Se invirtieron en los años 90 y principio de esta década más de un millón de pesos. Hoy se encuentra abandonado. Luego de asumir la renovación se creó otra cooperativa con fondos del FET en El Soberbio. El destino fue el mismo.
En San Vicente, luego de asumir como intendente en 2003, Luis Benítez promovió la creación de otra cooperativa con fondos del FET, así fue que surgió la cuenca granera, anexada a la Cooperativa Azucarera, en el kilómetro 1.265 de la ruta 14. Sólo en la maquinaria y en la obra se gastaron dos millones de pesos que llegaron en 2005 (resolución 369 del Ministerio del Agro de la Nación). Ni la Cooperativa Azucarera ni la cuenca granera acopian en la actualidad ya que en la región no se produce ni caña de azúcar ni maíz.
Y los productores que comenzaron con esas producciones al poco tiempo las abandonaron por la baja rentabilidad. En el caso del maíz es la segunda vez que se construye un silo con inversiones millonarias y termina en la ruina; el primero fue en Bernardo de Irigoyen por iniciativa del Ifai (Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial).
En el 2006 (resolución 557) llegaron $2.517.982 para “desarrollo avícola San Vicente” dándose nacimiento a la Cooperativa Avícola El Triunfo en el kilómetro 48 de la ruta provincial 13.
Los recursos fueron para construir un matadero-frigorífico, adquirir maquinaria y equipo, cámara de frío y vehículos, además de compra de pollitos bb y alimento balanceado.
El año pasado (resolución 976 del Ministerio del Agro) llegó un nuevo crédito de $200.661 para “fortalecimiento del desarrollo avícola”, entregados por el gobernador Closs hace un mes en la Fiesta del Ternero de Montecarlo. En la actualidad hay acusaciones cruzadas entre los mismos dirigentes, las ganancias no logran cubrir las inversiones y el proyecto se encamina al fracaso. Versiones extraoficiales señalan que la CAUL podría alquilar las instalaciones para su proyecto avícola.Otro de los emprendimientos que está parado es la cooperativa Cebollera La Sanvicentina. Hace dos años que concluyeron las instalaciones para acopio, selección y venta de cebollas y otros productos que emprenden con los colonos asociados y todavía no tuvo actividad plena.
En marzo de 2008 con la resolución 239 se aprobó la entrega de $2.599.441 del FET para “producción tecnológica de sustrato”, un costoso abono indispensable para la producción que se importa de otros países. La Fundación Parque Tecnológico de Misiones-Incutemi ejecuta el proyecto. El diputado Héctor Bárbaro presentó un pedido de informe en la Legislatura ante la paralización de las obras. “Hasta el momento no entregaron ni una bolsa de sustrato, supuestamente iban a producir más barato para los productores”, contó un productor de San Vicente. Rumores señalan que se están gestionando nuevos créditos porque se quedaron sin fondos y sin terminar el plan.
Para producir miel llegaron numerosos créditos ($1.466.094 por resolución 33 del año 2005) en concepto de producción y fortalecimiento apícola, sin embargo ningún productor vive de esa actividad. Hay casos aislados donde todavía poseen algunas colmenas, pero el asociativismo para comprar insumos y vender el producto al por mayor no existe en ningún punto de la zona tabacalera. Este año, a través de la resolución 39 del 24 de enero se aprobó otro monto de 471 mil pesos para “remuneraciones, viáticos y movilidad de técnicos” y gastos administrativos. Lo administra la Fundación de Asuntos Agrarios que preside el ministro del Agro.
La CTM recibe casi todos los años varios millones de pesos (en 2009 recibió 9 millones y en 2008, 7 millones) para un fondo rotatorio para comprar insumos en cantidad, pagar al contado y lograr mejor precio para los productores de tabaco. La entidad debería recuperar esos fondos al vender el insumo a los productores, pero sigue recibiendo dinero del FET año a año y los colonos se preguntan si en verdad funciona la “rotación” o cuál es el problema. Nadie les respondió.
Uno de los casos más escandalosos, que incluso fue denunciado como estafa a la Justicia, fue el proyecto para crear una cuenca cañera en San Javier. APTM recibió 1.276.000 (Resolución 131 de 2008) para “implantación de caña de azúcar” en 500 ha y capacitar a 300 productores; luego el IFAI recibió $1,5 millones ese mismo año para la “segunda etapa de la cuenca cañera”. En la actualidad no se superan las cien hectáreas de caña y algunas ya estaban plantadas con anterioridad. Todos los años falta materia prima para producir azúcar en el Ingenio y este proyecto terminó con varias denuncias por supuestas estafas de técnicos del Ifai y la APTM a productores, a los que les habrían hecho firmar por diez hectáreas, pero les entregaban dinero por una, quedándose con el resto.
Finalmente la APTM recibió $1.986.641 (resolución 294 del año 2006) para construir letrinas. Los convenios establecían el pago: 50% el colono, en tres años, y 50% con fondos del FET. Pasaron tres años, muchos colonos pagaron todo su crédito y todavía no le construyeron sus baños. Hicieron 120 baños y con el cobro del 50% debían constituir un “fondo rotatorio” para construirles a otros, sin embargo el fondo nunca rotó y muchos siguen esperando.
Fuente: Primeraedicionweb.com.ar
