Tomas un triciclo motorizado, sustituyes el asiento por la
tapa de un inodoro, instalas un procesador de residuos sólidos procedentes de
la digestión humana (si, materia fecal) y lo único que faltaría para recorrer
mundo sería una dieta rica en fibra.
Parece increíble (o fruto de alguna mente disparatada) pero es
el método de funcionamiento de este vehículo fabricado por Toto, un experto en inodoros y explorador
sobre ruedas que realizará un viaje de unos 750 kilómetros por Japón.

Mientras viaja el conductor no tiene más que levantar la tapa cuando le
viene un apretón, evacuar, limpiarse (por aquello de la higiene) y en lugar de
tirar de la cadena dejar que funcione el mecanismo de Neo que convierte los
excrementos en combustible.

El viaje que realizará este hombre es entre Kyushu y
Tokyo y servirá para promocionar la reducción de emisiones de CO2. Un viaje en
el que no envidiamos a quien le toque ir detrás del Toilet Bike Neo
durante un embotellamiento.
Página Oficial de Toilet Bike Neo:
Fuente: Tecnología en la RED, gizmodo.es