Guillermo Moreno - Secretario de Comercio Interior |
El Secretario de Comercio Interior se reunió con directivos de las compañías Prime y Tulipan y acordaron en mantener la producción sin reducir sus importaciones. Moreno quedó sorprendido por la cantidad de preservativos que se consumen en la Argentina. Mientras tanto, trabó la entrada de vibradores.
El afán de Guillermo Moreno por controlar las importaciones
está dando lugar a situaciones insólitas. La última de ellas se dio cuando el
Secretario de Comercio se reunió con directivos de las compañias Prime y
Tulipan, dedicadas a la producción de preservativos. Y es que entre las dos
manejan el 87% del mercado argentino.
Si bien la mayoría de sus productos están fabricados en la Argentina, ambas empresas tienen líneas “premium” que en muchos casos son importadas. Moreno logró llegar a un acuerdo y les confirmó que podían seguir con su actividad sin restringir sus importaciones.
Los directivos le comentaron a Moreno que el consumo de preservativos en la Argentina llega a los 50 millones de unidades por año. El Secretario de Comercio Interior se mostró sorprendido por la cifra, ante lo cual exclamó “cómo se coge en la Argentina, es impresionante”.
Mientras tanto, el funcionario impuso restricciones a la entrada de vibradores, con lo cual el negocio de los sex shop podría verse perjudicado. En este caso todos los productos son importados y no pasaron la mirada escrutadora del secretario de Comercio Interior.
"Me avive enseguida, lo ponen en la declaración como "artículo para el placer femenino", se jactó el funcionario y de un plumazo directamente prohibió su importación.
Si bien la mayoría de sus productos están fabricados en la Argentina, ambas empresas tienen líneas “premium” que en muchos casos son importadas. Moreno logró llegar a un acuerdo y les confirmó que podían seguir con su actividad sin restringir sus importaciones.
Los directivos le comentaron a Moreno que el consumo de preservativos en la Argentina llega a los 50 millones de unidades por año. El Secretario de Comercio Interior se mostró sorprendido por la cifra, ante lo cual exclamó “cómo se coge en la Argentina, es impresionante”.
Mientras tanto, el funcionario impuso restricciones a la entrada de vibradores, con lo cual el negocio de los sex shop podría verse perjudicado. En este caso todos los productos son importados y no pasaron la mirada escrutadora del secretario de Comercio Interior.
"Me avive enseguida, lo ponen en la declaración como "artículo para el placer femenino", se jactó el funcionario y de un plumazo directamente prohibió su importación.
Fuente: Lapoliticaonline.com, Territoriodigital.com