Desde hace varios meses el mal estado de los postes de teléfono generan inconvenientes en San Vicente y con cada tormenta los problemas se incrementan.
Estos son solo dos ejemplos, uno en el Barrio 80 Viviendas y el otro en plena Avenida Libertador. Muchos son apuntalados o sujetados con alambres por los propios vecinos quienes manifiestan su malestar al ver que la empresa no les permite tocarlos por más que estén literalmente cayendo sobre sus casas. Otra de las molestias son las largas esperas que tiene el usuario si decide alertar del problema vía telefónicamente las cuales se hacen eternas y cuando por fin atiende un operados solo se limitan a decir que ya tienen registrado el reclamo.
Este fin de semana se esperan algunos fenómenos de lluvia dejando más preocupados a quienes hoy no saben que más hacer con este problema.
Fotos: David Solís