El Concejo Deliberante de nuestra localidad declaró la
Emergencia Vial en todo el municipio,
debido a la gran cantidad de lluvias
caídas y la imposibilidad de reparar los caminos. La declaración se produjo en
la sesión ordinaria, que se llevó a cabo el martes por la noche, con el voto de
todos los concejales tras el pedido del Poder Ejecutivo Municipal.
En los considerando se justificó la medida por las “copiosas
lluvias registradas durante los últimos meses, que ocasionaron que los caminos de
barrios periféricos y rurales fueran afectados seriamente”. A eso hay que sumarle la constante preocupación del ejecutivo al ver como camiones o maquinaria agrícola transita en esos días por los mismos dejándolos intransitables.
El pedido fue uno de los tres temas que se trataron en la
sesión de este martes. Es una forma de evitar los reclamos que realizan los
colonos hace años por el mal estado que presentan los caminos terrados. Principalmente
los productores se ven afectados a la hora de sacar sus productos o al salir de
las chacras hacia la ciudad.
Martins Do Santos tiene un agroturismo a más de veinte
kilómetros de la ruta y afirmó que “este año no pude recibir a ningún viajante
porque el camino está en pésimas condiciones. Ahora las máquinas entraron y
esperemos que no salgan sin terminar de arreglar la picada completa”.
El desaire de este colono se repite en la mayoría de las
picadas grandes del municipio y en algunos de los barrios más alejados del
centro de la ciudad. Las quejas llegan desde la picada Maderil en el kilómetro
1268, Picada Payeska en el kilómetro 1281 también de la ruta Nacional 14.
La justificación de la Municipalidad es que “el esfuerzo
para la reparación rápida y el mantenimiento efectivo de los casi cinco mil
kilómetros de caminos terrados, han sido sectores más afectados y distantes
entre sí”.
En resumen queda claro que el ejecutivo no pueden hacerse cargo del mantenimiento de los caminos terrados rurales, ni urbanos y que en la mayoría de los casos acusan de su mal estado a las copiosas lluvias o al uso de maquinarias pesadas que los propios productores y/o vecinos de San Vicente en esos días.