Días atrás dos detenidos de la Comisaría Primera de Dos de Mayo limaron los barrotes de una celda y accedieron a un patio interno para luego darse a la fuga por la calle. Los evadidos fueron apresados al día siguiente tras varias horas de búsqueda. Ambos están acusados de delitos contra la propiedad y son oriundos de la zona.
Luego de la recaptura, las autoridades policiales ordenaron el relevo del jefe de la dependencia, comisario Marcelo Camacho, quien pasó a cumplir funciones en la Unidad Regional VIII de San Vicente, de la cual depende la Comisaría de Dos de Mayo. En su reemplazo fue nombrado el oficial principal Enrique Oscar Arenhardt, hasta entonces jefe de la Comisaría de Colonia Alberdi, dependiente de la Unidad Regional II de Oberá. Paralelamente, se inició un sumario administrativo interno del caso, hecho que puso en evidencia, una vez más, las graves deficiencias en la seguridad de esta dependencia, no sólo por las fallas institucionales en el control de los presos, sino también por poner en riesgo la integridad física de civiles.
El comisario Camacho, ya acumula varios traslados por diferentes denuncias. Hasta mediados de diciembre del año pasado estuvo al frente de la Comisaría de Florentino Ameghino, cuando afrontó un sumario por estar sospechado de cobrar coimas a abogados para brindar información sobre detenidos.
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