Con un emotivo acto, la comunidad de El Soberbio recordó al suboficial mayor Roberto Omar Ballesteros en el décimo aniversario de su fallecimiento en acto de servicio. Ballesteros perdió la vida el 2 de febrero de 2015, durante un asalto al Banco Macro de la localidad.
La ceremonia se llevó a cabo en la plazoleta que lleva su nombre, sobre la avenida San Martín, donde se realizó una invocación religiosa y se depositó una ofrenda floral en su honor. Al evento asistieron autoridades policiales, familiares, compañeros de la fuerza y vecinos, quienes rindieron tributo a su compromiso y valentía.
El asalto que conmocionó a Misiones
El 2 de febrero de 2015, alrededor de las 8:15, un grupo de delincuentes irrumpió en la sucursal del Banco Macro de El Soberbio y sustrajo aproximadamente 1.500.000 pesos, además de una pistola 9 mm, teléfonos celulares y otros objetos de valor. En su huida, los asaltantes tomaron rehenes y ejecutaron a sangre fría al suboficial Ballesteros, quien se encontraba rendido en el suelo.
Los delincuentes lograron cruzar el río Uruguay con dos rehenes y continuaron su escape en territorio brasileño. Sin embargo, la fuga terminó en Tiradentes do Sul, cuando el vehículo en el que se desplazaban sufrió un desperfecto mecánico. En el operativo de captura, las autoridades brasileñas incautaron un fusil, chalecos antibalas y uniformes mojados de la Policía Militar de Brasil, además del arma sustraída a los policías misioneros.
Condena tardía, pero ejemplar
Tras años de investigación, en enero de 2023 la Justicia de Brasil condenó a 28 años de prisión a Evandro Scholer (40), Regis Da Silva Lopes (41) y Alex Lima Schmitz (31), hallados culpables del asalto, la toma de rehenes y el asesinato del policía misionero. Otro implicado, Arlindo Da Luz (52), también había sido procesado, pero falleció en agosto de 2022 antes de recibir sentencia.
La sentencia marcó el cierre de un caso que conmocionó a la provincia y dejó una herida imborrable en la fuerza policial. En su fallo, la Justicia brasileña subrayó el "menosprecio por la vida humana" con el que actuaron los delincuentes, destacando la brutalidad con la que ejecutaron a Ballesteros.
A una década de aquel trágico episodio, la comunidad de El Soberbio sigue recordando con respeto y gratitud la valentía del suboficial Ballesteros, cuyo nombre quedó grabado en la historia de la provincia como un símbolo de entrega y sacrificio.